Aunque parezca un tema poco importante frente a lo que significa concebir y traer una nueva personita al mundo, estar cómoda en el día a día es fundamental para pasar el embarazo lo mejor posible.

Los dos primeros meses podrás continuar usando la ropa común, pero hacia finales del tercero comenzarás a notar que los vaqueros no te abrochan o los pantalones te quedan demasiado justos. Para estar en casa los pantalones de jogging o las calzas son una buena solución, pero si trabajás y necesitás estar elegante lo ideal es comprarte un pantalón de embarazo negro, azul o marrón e irlo combinando con distintas camisas o sweaters. Incluso, por qué no, podés probar alguna camisa de tu esposo que puedas usar por fuera de los pantalones.

También podés hacer un pantalón "casero", dejando abierta la parte del cierre y colocando una tela elastizada (licra algocón o algodón para puños) en el triángulo que queda abierto. 

Si sos de las que les gusta lucir la panza desde los primeros meses más que disimularla, lo ideal son los enteritos o vestidos maternales con pinzas y botones que se van corriendo para ir ajustando a las diferentes etapas. Un punto especialmente importante es el de la ropa interior, que deberá ser buena además de cómoda. El soutien es de las primeras prendas que vas a tener que cambiar, ya que desde el tercer mes vas a notar un aumento en el tamaño de los pechos. Una opción es comprar un soutien como el que usás habitualmente, uno o dos números más grandes. Otra es comprar ya soutienes para la lactancia, para que te sirvan durante este período y también mientras das pecho. Si estás embarazada durante los meses del verano, también deberás decidir si usar un bikini dejando lucir tu panza o una malla entera que puede ser un talle o dos más grande que lo normal, para tener lugar para la panza o aunque sea más costoso, un traje especial de maternidad. Otro consejo es que te habitúes al uso de sacos de hilo o lana, ya que puede sucederte que cambies a menudo la temperatura de tu cuerpo, sintiendo de a ratos frío o calor. Con un saco a mano siempre tendrás la opción de ponértelo o sacártelo para estar a gusto. 

En cuanto a los pies, debido a la retención de líquidos, es probable que se t ehinchen y no te entren algunos de tus zapatos. Incluso los pies de algunas mujeres aumentan de tamaño y nunca recobran su tamaño original. Si vas a necesitar comprarte zapatos nuevos elegí unos anchos y bajos, para que te sirvan hasta el final.

Si tu presupuesto te lo permite cómprate alguna pieza que te haga sentir especial y sexy. Unos pantalones de terciopelo negro por ejemplo, pueden hacer verte mas estilizada, y además te combinarán con muchas otras piezas. 

La foto fue tomada de: www.morguefile.com 

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